En todas las regiones del mundo, las personas LGBTIQ+ de todas las edades sufren violaciones y abusos de los derechos humanos. La herramienta para el análisis de las deficiencias en la aplicación de las normas de las Naciones Unidas sobre las personas LGBTIQ+ tiene como objetivo ayudar a las empresas a hacer la parte que les corresponde para contrarrestar estos abusos y promover la inclusión de las personas LGBTIQ+ dentro y fuera del lugar de trabajo. La herramienta pone de relieve buenas prácticas para promover la igualdad de las personas LGBTIQ+ en todo el mundo, permite medir el progreso a lo largo del tiempo y ofrece recursos para la mejora continua, con lo que ayuda a las empresas a cumplir con sus responsabilidades en materia de derechos humanos y ser agentes de cambio activos.

Aunque se ha avanzado considerablemente en el fomento de la inclusión de las personas LGBTIQ+, aún nos queda mucho camino por recorrer para lograr una verdadera igualdad. Lamentablemente, en 2021 sigue habiendo casi 70 países en los que las relaciones consentidas entre personas del mismo sexo están tipificadas como delito. Son pocos los países donde se reconoce jurídicamente la identidad de las personas transgénero y se protegen sus derechos, y aún menos los que protegen a las personas intersex . A las empresas les corresponde una función y responsabilidad importante para que se respeten los derechos humanos de las personas LGBTIQ+ dentro y fuera del lugar de trabajo.